¿Has escuchado el concepto de plagio? En el ámbito empresarial, consiste en robar las ideas o productos intelectuales de otras personas o empresas haciéndolos pasar como propios y, en el peor de los casos, patentarlos antes que el verdadero creador. Sin embargo, esto se puede evitar con un adecuado registro de propiedad intelectual.
Se define como propiedad intelectual a todas las producciones del intelecto humano con las que se puede obtener un beneficio económico, algunos ejemplos son:
La Organización Mundial del Comercio (OMC) distingue dos categorías de derechos de propiedad intelectual:
- Derechos de propiedad industrial que promueven la innovación y estimulan la competencia justa.
- Derechos de obras artísticas y literarias.
La propiedad intelectual es un tipo de activo intangible que se puede proteger legalmente a través de una patente.
"Registrar la propiedad intelectual promueve la originalidad y la libre competencia."
¿Cómo registro una patente?
Una patente es un derecho sobre la propiedad intelectual otorgado por una institución gubernamental, que le concede al creador el uso exclusivo de su creación por un lapso determinado. Esto excluye a terceros de replicar, fabricar o comercializar con el producto o idea.
En México, el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) es el organismo que se encarga de otorgar las patentes, las cuales tienen una duración de 10 años.
Las patentes facilitan el inicio de acciones legales si hay un mal manejo de una marca, además de que otorga el uso de licencias y franquicias.
El trámite se puede realizar en línea y de forma presencial. En ambos casos, se solicitan documentos que avalen al propietario:
Tramitar una patente es muy importante para el desarrollo y la competitividad de una empresa, ante lo cual es conveniente contar con una consejería especializada.
En TERGUM, contamos con una división de negocios especializada que podrá ayudarte a evaluar y proteger los activos intangibles de tu empresa, como la propiedad intelectual.
